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lunes, 17 de octubre de 2016

Reggaetón

El otro día me pasó una cosa curiosa: sin ser fan del reggaetón me encontré defendiéndolo en Twitter. Mi interlocutor me exigía que le mencionara una sola canción de dicho género musical que no fuera machista. Por supuesto, cuando otra persona le enlazó ‘Lo que las mujeres quieren’ (canción de una reggaetonera lesbiana que habla de la deconstrucción de los roles de género), puso una excusa y dijo que no le valía. Era evidente que iba a pasar algo así, porque la canción chocaba contra una verdad esculpida en piedra: que el reggaetón es machista.

¿Lo es? Bueno, no soy un experto, pero yo diría que lo que define un género musical es, sobre todo, un conjunto de características formales. Ciertos sonidos, ciertos instrumentos, ciertos ritmos, etc. Ningún género musical está definido por sus letras. Sí, están los tópicos (el punk siempre habla de política, el pop sólo tiene canciones de amor) pero no son más que eso, tópicos. Cualquier género musical puede tratar cualquier tema, y puede hacerlo desde cualquier enfoque. Que una letra sea más o menos machista dependerá de la voluntad de quien la escriba, no del género musical en que se enmarque.

Ojo, no estoy negando que las letras del reggaetón sean machistas. De hecho, apostaría a que la mayoría (y, sobre todo, el más mainstream) lo son. Al fin y al cabo, los letristas y compositores que trabajan este género se han criado en una sociedad patriarcal, y librarse de esa educación es un trabajo que nunca acaba. Pero claro, eso mismo puede predicarse de todos los géneros musicales, de todas las películas, de todos los videojuegos y, en general, de todas las obras del intelecto. Sí, también de las que te gustan. Todas salen del mismo tipo de sociedad.

Poner el foco en el reggaetón es, a mi juicio, racista y clasista. Estamos hablando de un género musical salido de América Latina y que es claramente popular y bailable. No tiene ninguna clase de prestigio cultural, al contrario que otros ritmos como el rock, el pop o el metal (1). Nosotros, blancos europeos de clase media, podemos mirarlo desde arriba y señalar sus obvios defectos (2). Si somos tíos, incluso podemos sentirnos muy guays diciendo lo machista que es y lo degradante que es el perreo. Sí, criticar al reggaetón mola porque todo el mundo te ríe la gracia.

Así que quizás podríamos ir a un ejercicio un poco más difícil: analizar críticamente lo que nos gusta. Todas esas canciones de amor que en realidad tratan de acoso. Todas esas letras que usan el verbo “follar” en sentido despectivo, como algo que una persona le hace a otra, que queda deshonrada. Todos esos temas homófobos, que justifican la violencia de género (3) o que parecen escritos por un usuario Premium de Forocoches. Y la mierda es que toda la “buena música”, prestigiosa y valorada, está llena de esas cosas.

Claro, criticar las cosas que nos gustan ya es más complicado, entre otras cosas porque nuestros gustos definen nuestra identidad. Pero puede hacerse, en serio. Y diré más: podemos ver fallos en un disco, en una novela o en un juego sin que dejen de gustarnos y sin que tengamos que arrojarlos a la hoguera (4). No va a pasarnos nada por cambiar de opinión y por desfanatizarnos un poquito.

Ser crítico es una capacidad maravillosa, pero ejercerla sólo hacia las cosas que nos resultan ajenas es como tratar de pasarse la vida en nivel fácil: no está mal pero seguro que puedes hacerlo mejor.






(1) Géneros que también empezaron en su momento como manifestaciones casi contraculturales, y que míralos ahora.

(2) O más bien, los obvios defectos de las tres canciones que conocemos porque se han puesto de moda.

(3) O que pretenden condenarla y se marcan un victim blaming.

(4) A veces este cambio radical sí que se produce. Por ejemplo, a estas alturas yo no podría disfrutar en un concierto donde se tocara ‘Puto’ (la canción esa tan bonita cuyo estribillo dice “¡Matarile al maricón!”), por ejemplo. Pero en la mayoría de los casos podemos disfrutar de una obra que sea problemática a nivel ideológico igual que podemos apreciar otra que tenga defectos formales sin tener que negar esas características.



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2 comentarios:

  1. Suscribo totalmente.

    Tampoco soy de reggaetón, pero hace ya tiempo que se puso de moda machacarlo por gente que por ello se cree guay y culta por ello; dándose en muchos casos la ironía de que luego eran las personas más machistas del mundo, pero, ¡eh!, no me digas nada que odio el reggaetón por machista. Tres cuartos de lo mismo pasa con gente asquerosamente machista que dice que “todas putas” y que “denuncias falsas” a la que se le llena la boca de criticar a “50 sombras de Grey” por lo machista que es, para así sentirse moralmente superiores.

    En cuanto se rasca un poco en esto te das cuenta de que en realidad es gente que sólo quiere una excusa para regodearse maltratanto algo con la aquiescencia de la sociedad. Se sienten superiores al escuchar otra música y leer otros libros y si, de paso, le pueden dar una patada a “ese género musical de panchos incultos” y “esas noveluchas para mujeres” chapó. Que esas son cosas de mala calidad, no como mis gustos, en esos ya no ven el machismo ni otros defectos. Anda que no me he ganado miradas de asco y que me llamen “feminazi” por esto en ciertos grupos.

    Caso real:

    Digo que me gustan las novelas de aventuras y fantasía y no demasiado la novela rosa. ¿Resultado?: *Aplauso* “¡Tu eres de las nuestras compañera! ¡50 sombras es una mierda! Tan machista y de pésima calidad. ¡Cómo le puede gustar a las mujeres, eso es que serán amas de casa frustradas e idiotas! Jeje.”

    Pero luego digo que las novelas de Burrougs son también ultra machistas y racistas porque las mujeres son floreros y se denigra a las razas que no son la blanca; y que me parecen malas porque el argumento está cogido por los pelos hasta llevar a lo ridículo a veces y es muy tópico, amén de que literariamente tampoco me parecen la gran cosa (esos eran básicamente sus argumentos para poner a parir la novela rosa). ¿Resultado?:
    “¿Eres una feminazi de esas? ¡No esperaba esto de ti! ¡Menuda exagerada! No serán perfectas, pero cumplen muy bien su función de entretener y son un éxito aunque no te guste.”

    ¯\_(ツ)_/¯

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    Respuestas
    1. Pues eso, que encogimiento de hombros :p Hay gente que no merece otra cosa.

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